Para determinados contaminantes se utiliza el principio de flotación para separarlos del agua.
A través de soplar aire al fondo de la tina y añadiéndole un agente químico que favorece la flotación y formación del lodo que se espesa en la superficie del agua, de la cual viene siendo removido a través de un puente giratorio dotado de barrenas.
Los flotadores son utilizados en plantas al servicio de laminadores en frio para la separación del aceite y del agua en la emulsión de aceite.
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